Por ti.


Te quiero, como sabemos los dos, como otra historia cualquiera, pero nuestra.
Te quiero, incluso ahora, cuando no estás, cuando me has dejado sola.
Intentando ser de nuevo, intentando dejar de buscarte, intentando no desplomarme.
Me cuesta respirar, me cuesta hablar, me cuesta ser...
Sin quererlo se fue nuestra canción, nuestros domingos por la tarde, nuestras cervezas por la noche... y todo aquello que estaba por venir. Todo aquello que como un egoísta te llevaste y no me dejaste ni probar. Eso que tanto añoro sin ni siquiera haberlo tenido. Eso que soñamos construir.
Las noches se vuelven más oscuras, los días más largos, y las tardes eternas.
La vida pasa tan deprisa... y tú te fuiste con ella.
¿Quién me lo iba a decir?
Quiero que sepas que te seguiré amando, como el principio de estos versos, como el final de nuestra canción... y como el infinito de tus besos.

Comentarios